El intestino delgado es un órgano tubular que forma parte del sistema digestivo y se encuentra entre el estómago y el intestino grueso. Es el lugar donde se lleva a cabo la mayor parte de la absorción de nutrientes, como proteínas, carbohidratos, lípidos, vitaminas y minerales, que son necesarios para mantener nuestro cuerpo funcionando adecuadamente.
El intestino delgado está dividido en tres partes: el duodeno, el yeyuno y el íleon, cada una con características distintas que les permiten realizar diferentes funciones. Además, su pared interna cuenta con vellosidades y microvellosidades que aumentan significativamente su superficie de absorción, permitiendo la entrada de nutrientes al torrente sanguíneo para su distribución a través del cuerpo.